Archivo por meses: abril 2022

¡MADRE MÍA, QUIEN ME MIRE TE VEA!

Siguiendo con el proyecto de mantener vivo el legado de D. Manuel Ares, hoy publicamos este artículo que había escrito y fue publicado en la revista del Carmen del año 2018.

A lo largo de todo el año hay un goteo de Ponteses y no Ponteses que van por la Capilla de Nuestra Señora del Carmen, o bien entran en el recinto para ver su Imagen o se paran en el altar exterior para dirigirle una plegaria. Ella es la intercesora ante su Hijo Jesús. Nuestros momentos de penas o alegrías, nuestros momentos de desaliento, nuestras dudas, nuestras faltas de salud… Todos lo depositamos a sus pies y ella se lo muestra a su hijo Jesús y Él que lo ve todo pues es Todopoderoso sale a nuestro encuentro para que no caminemos solos por este destierro mientras peregrinamos por este mundo.

Nuestra Señora del Carmen es el faro de nuestras vidas, Ella nos acompaña siempre y nosotros con nuestras debilidades vamos a su lado y cuánto más triste nos sentimos, Ella nos cubre con su manto maternal.

Si somos verdaderamente sus hijos debemos llevar con dignidad su distintivo, me refiero al Santo Escapulario, no es ningún amuleto, es un signo de nuestra consagración a Ella, es un signo con el cual decimos que Ella es nuestra Madre en este mundo atribulado. Ya decía Santa Teresita del Niño Jesús que para Ella es más Madre que Reina. A ella le gustan las flores que le dejamos a sus pies pero más le gustan las flores que sólo Ella ve. Nuestros sacrificios, nuestra humildad, nuestro cariño hacia los demás hacia los que más nos cuestan, saber pasar inadvertidos.

Pero estas flores y muchas más, hacerlas con mucho amor. Ella ve y nos premia, son como perlas que vamos cosiendo a nuestro Traje cuando nos venga a buscar y presentarnos antes su Hijo Jesús: ¡Madre mía del Carmelo por su Santo Escapulario llévame contigo al Cielo!

Me gustaría que la Capilla de Nuestra Señora del Carmen fuera un remanso de paz, allí están los dos: Jesús en el Sagrario y al lado la imagen de su Madre, de nuestra Madre. Jesús desde la cruz la tarde del Viernes Santo la entregó por Madre a Toda la Humanidad. «Y desde aquel momento la recibió en su casa», así lo dice San Juan en el evangelio. Imagino que todos tenemos un retrato de nuestra madre terrena, tengamos un signo de Nuestra Madre del Cielo y hablemos con Ella como si lo hiciéramos con la de la Tierra. Ambas escuchan, ambas nos acogen con cariño y aunque no digan nada sabemos que nos llevan en su corazón maternal.

¡Madre y Reina del Carmelo! Son muchas las gracias que he recibido de tu Hijo a lo largo de toda mi vida por mediación tuya. Por ello hoy vengo a darte las gracias y a consagrarme a ti en cuerpo y alma.

¡Madre! Te ofrezco: mis ojos para mirarte , mi voz para bendecirte, mi vida para servirte y mi corazón para amarte. ¡Madre y hermosura del Carmelo!: que el bendito Escapulario que llevo en mi pecho sea un recuerdo de todos tus virtudes que procuraré imitar.

Que nunca tenga la desgracia de mancillar la blancura bautismal que simboliza mi Escapulario. Que rechace todo aquello que me aleje de tu Hijo Jesús Madre, concédeme la dicha de que viva siempre mi lema: conocerte, amarte, imitarte, para mejor conocer, amar, imitar e irradiar a tu Hijo Jesucristo. Amén.

¡MADRE MÍA, QUIÉN ME MIRE TE VEA!

Manuel Ares, Sacerdote.

CONOCIENDO A MONSEÑOR FERNANDO GARCIA CADIÑANOS, OBISPO DE LA DIÓCESIS DE MONDOÑEDO – FERROL I PARTE

Hace unas pocas semanas, el Obispo de la Diócesis de Mondoñedo – Ferrol visitaba nuestra Unidad Pastoral, más en concreto la parroquia de Santa María de As Pontes donde fue recibido por los párrocos D. José Vega y D. Manuel Ares (DEP).

El equipo de catequistas ( Sandra, Pilar, Manoli, Celia y Javier) trabajaron con los niños de la catequesis para explicarles quién era el Obispo, por ello los niños de primera comunión y los de post Comunión – Confirmación redactaron unas preguntas D. Fernando, que se le entregaron al finalizar la eucaristía, y hoy publicamos las respuestas de nuestro Obispo.

PREGUNTAS DE LOS NIÑOS Y NIÑAS DE PRIMERA COMUNIÓN DE SANTA MARÍA DE AS PONTES


Como conociste a Dios? Conociste a algún ángel?
A Dios se le conoce poco a poco, no por apariciones, ni mucho menos, sino a través de la oración y de la lectura de la Palabra de Dios. En ambos lugares descubres cómo es Dios y lo que te dice. Te invito a que todos los días reces al irte a la cama y le des las gracias por el día, pidiéndole perdón por lo que hayas podido hacer mal y presentándole alguna persona por la que quieras rezar. También te invito a que todos los días te acostumbres a leer un poco el Evangelio: es muy bonita la historia de Jesús. Así tú también podrás conocer a Dios un poco mejor…

Como es ser Obispo? Como es el día a día de un Obispo?
Pues yo tampoco lo sé mucho, porque, como sabes, llevo muy poco tiempo como Obispo, apenas cinco meses. Cada día es muy diferente, no hay ninguno igual, y hasta ahora han sido todos muy novedosos y diferentes. Me suelo levantar sobre las 7’30 h y tras el aseo, rezo un poco delante de Jesús. Tras desayunar y hacer las cosas de casa, leer la prensa, lo dedico la mañana a tener reuniones y encuentros con gente que me quiere visitar: sacerdotes, religiosos y seglares que quieren contarme alguna cuestión importante sobre la que decidir. Tras comer, que suelo intentar hacerlo con alguna de las visitas de la mañana, la tarde la dedico a completar algunas visitas, o a leer un poco, o a visitar alguna de las parroquias donde celebro la Eucaristía y me encuentro con la gente. Tras la cena, suelo responder cuestiones del ordenador y, tras dar gracias a Dios por el día, me voy a la cama sobre las 0’30 h. Como ves, un día muy completo, muy diverso…

Como y por qué te hiciste sacerdote?
Yo me hice sacerdote a través de mi familia, que era muy religiosa. También el ambiente del colegio me influyó. Además tengo un hermano sacerdote más mayor que fue al seminario antes que yo y al que visitaba todos los domingos. De esta manera, entré en contacto con el Seminario, el lugar donde se forman los futuros sacerdotes. Me gustó mucho el ambiente y decidí entrar allí cuando tenía 13 años. Poco a poco fui pasando los cursos y disfrutando en lo que hacía y vivía. La vida sacerdotal me atraía como una propuesta que me llenaba la vida. Con el paso de los años, a través de la oración y el diálogo con muchas personas, descubrí que Jesús me invitaba a ser sacerdote y llevarle más directamente a todas las personas. El sacerdote es el que sirve a todos y quiere llevar a Jesús a todos. Y tú, ¿no te has planteado ser tú sacerdote?

Que diferencia notas entre ser sacerdote y ser Obispo?
El obispo es el responsable de una diócesis, un territorio muy amplio en el que viven muchos cristianos. Para ello tiene a su cargo un grupo de sacerdotes que son sus colaboradores directos en el acompañamiento de todos esos cristianos que quieren conocer más a Jesús, celebrar los sacramentos, vivir con fidelidad el Evangelio. El Obispo es como el que nos une a todos los cristianos de una Diócesis y nos vincula con toda la Iglesia universal.

Por qué llevas colgada una cruz grande?
Es uno de los signos que identifican al Obispo, junto con el anillo. La Cruz simboliza a Jesús, que murió por nosotros, y al que el Obispo quiere imitar sirviendo y dando la vida a todos. Pero también es bueno que todos los cristianos lleven una cruz en el cuello aunque sea pequeña, o una medalla de la Virgen. Yo llevo una cruz pequeña en mi pecho que me regalaron de niño… ¿por qué no le dices a tus padres que te compren una pequeña? Es una manera de pedir a Dios que te guarde, que te ayude… y que quieres ser como él.

Por qué el Obispo siempre va vestido de oscuro o de negro?
No siempre va vestido así, aunque casi siempre. El vestido de los sacerdotes, desde hace mucho tiempo, es oscuro para distinguirse del resto.

Le gustaba ir a catequesis cuando era pequeño? E ir a misa?
Mucho… La catequesis nos la daba un sacerdote que se llamaba como yo, y que nos daba caramelos si respondíamos bien a las preguntas. También me gustaba mucho ir a misa, sobre todo ayudar: siempre era monaguillo, y disfrutaba… ¿Por qué no eres tú también monaguillo con tus amigos? Verás cómo la misa se vive de otra manera…

Que te dijeron en casa cuando dijiste que querías ser sacerdote?
La verdad que no sé, es una cosa que salió también en la familia conjuntamente, por lo que seguro que fueron ellos también quien me lo dijeron… ¿qué crees que te dirían tus padres si tú se lo dijeras? Ya me contarás…

Sabes jugar bien al fútbol? De qué equipo eres?
Yo siempre jugaba al fútbol de defensa, y era bastante bueno: no pasaban muchos delanteros delante de mí… pero luego lo he dejado, y apenas juego. Me gusta ver algún partido, especialmente de mi tierra, o cuando son partidos importantes. Soy del Burgos CF. Y si es de Primera división… me gustan más los equipos pequeños que los grandes… pero no tengo predilección por ninguno.

Alguna vez te enfadas con los curas?
Muchas… ¿tú no discutes con tus amigos? Pues yo también con ellos… hay muchas cosas que hacen bien, pero hay otras que me gustaría que fueran distintas, que fueran mejores… y procuro decírselo para ayudarnos a crecer. Cuando hay algo que no nos gusta, lo tenemos que decir.

Por qué te hiciste Obispo?
Yo no me hice Obispo, me hicieron. No es algo que he buscado, es algo que me ofrecieron y creí que no podía decir no, porque estoy en las manos de Dios y nunca he dicho que no a lo que me han ido proponiendo. Es una manera de hacer realidad que mi vida no me pertenece, que la he ofrecido a Dios y a los demás, y que son otros los que deciden sobre mi tiempo, mi quehacer, mi vida…

Sabes contar chistes?
Suelo contar alguno de vez en cuando, pero soy muy malo y se me olvidan rápido… ¿Te cuento uno? En un examen le dice la profesora a Jaimito: ¿Cómo se dice memoria en inglés? Memory, responde Jaimito. Muy bien, ponlo ahora en una frase. Y dice Jaimito: Salté por una ventana y memory…

Por qué no estás casado?
Los sacerdotes católicos no nos casamos porque queremos dedicar toda nuestra vida al Señor y a su Iglesia. El no casarnos nos debe de dar una mayor libertad para el amor y la entrega, para la disponibilidad, para cuidar los afectos y descubrir lo importante. No quiere decir que casarse sea malo, ni mucho menos, sino que el casado tiene ya una familia muy concreta a la que se tiene que entregar totalmente, que atender y cuidar: el sacerdote tiene una gran familia que es la Iglesia, que sois vosotros… ¿Tú ya has pensado qué quieres hacer de mayor?

Te pagan por ser Obispo? Por que si te pagan como en la Central térmica yo también me hago Obispo ( comentario de Tomás un niño de 6 años)
Sí, me pagan, soy mileurista: un poco más de 1000 euros. ¡Pero no me falta de nada! El dinero no es lo más importante de la vida… ¿no crees?

PATRIMONIO PONTÉS III

Coa miña lembranza a D. Manuel Ares Fernández, un home de fe.

O cruceiro de hoxe é un exemplar dos que clasifico como completos, pois como xa dixen, ten gradas, pedestal, varal, capitel, cruz anverso co Crucificado e cruz reverso coa Virxe.
Elixín este exemplar porque considero que ten dous elementos gravados pouco coñecidos e que moita xente non sabe que os ten, aínda que teñan visto o cruceiro moitas veces.

Falo do cruceiro da Vilavella, cruceiro de adro da igrexa e cruceiro de encrucillada. Ao redor del tiña lugar a procesión dos santos o día da festa do patrón, o San Andrés. Os santos saía da igrexa, ían ata o cruceiro, daban a volta arredor e volvían cara a igrexa. Tamén era un cruceiro de encrucillada porque estaba situado nun cruce de camiños: o que ía a Vila e As Veigas, que era o chamado Camiño Real; o da igrexa, que viña da Casilla e pasaba por diante da igrexa atravesando o río por unha ponte de madeira e que, unha
vez pasada, dividíase en dous, un cara a Parrocha e a Mourela e, o outro, cara o Acibido.


Hoxe, só ten un acceso para chegar a el e que coincide coa entrada á depuradora. O da esquerda é o camiño da Igrexa.

CRUCEIRO DA VILAVELLA

imaxe do cruceiro da Vilavella

Hoxe, xunto coa igrexa, o cemiterio e dúas casas é o pouco que queda da Vilavella, noutrora unha das parroquias con máis vida do Concello.


É un cruceiro todo el feito en pedra de gra ou de granito, sólido no seu conxunto. É un fermoso exemplar que encerra unha simboloxía especial, da que logo falarei, representada na parte da cruz reverso.


Imos ver as súas partes e as súas especiais características.

Plataforma e gradas:
É cuadrangular, con dúas gradas de cantería e unha soleira ou base, visibles na actualidade, que é moi probable que sexa a parte superior dunha terceira grada que quedou soterrada co paso do tempo e polos sucesivos recheos do camiño.

Pedestal:
É cuadrangular e alto. Dividido en tres partes: A primeira e inferior é prismática cuadrangular, logo ten unha media escocia e, na parte superior, a xeito tronco-piramidal-cuadrangular invertida, aínda que non de todo, pois na parte alta remata con chafrán e nunha zona cha que serve de base ao varal ou fuste. Non ten adobíos nin escritura visible.

Varal:
O varal é de sección oitavada ou octogonal. É un varal alto e proporcionado, pois non é dos máis grosos se o comparamos con outros do concello.
Polo fronte ou anverso (cara do Cristo) ten figuras labradas: os tres cravos, o martelo, as tenaces, a punta de lanza e a escada. Simboloxía, todas elas, da Paixón.


Na parte alta, e nas catro caras, tamén ten un debuxo labrado: un rectángulo rebaixado cun rombo saínte no seu interior, catro botóns (tamén saíntes) ao redor do rombo e un no centro del.

Capitel:
Conta con dúas volutas angulares en cadansúa cara. No medio de cada unha delas ten un anxo; debaixo de cada anxo ou querubín, e de voluta a voluta, leva unha cadea e, pola parte inferior da mesma, o que semella ser as ás do anxo.


Na parte inferior do capitel leva un rebaixe, facéndose o capitel do mesmo ancho co varal e encaixando perfectamente con el.


Na actualidade ten rota unha das volutas (a dereita do anverso, segundo se mira), fáltalle un anaco pola parte de enriba da mesma.
Outra característica deste capitel é que os anxos están ollando de fronte.

Cruz:
A cruz é de sección oitavada ou octogonal igual co varal. É unha cruz alta e delgada, facendo xogo co varal.


Os brazos menores da cruz rematan abertos en catro pétalos con botón central.


No seu anverso leva o Cristo e no reverso, coma a gran maioría dos cruceiros a imaxe da Dolorosa. E neste lado, sobre o crucel, sobresae unha coroa por riba da cabeza da Virxe. Vai pegada á cruz e afastada da Virxe. O efecto óptico ao observar dende abaixo é que está enriba da testa da Virxe María.

Cruz anverso, o Cristo:
É unha imaxe de Xesús bastante grande en relación ou comparación con outros da zona, aínda que non é moi groso, máis ben todo o contrario.


Cartela de INRI ilexible, rectangular horizontal. Coroa de espiñas. Ollos pechados. Barba escasa. Mans abertas e un cravo en cada unha. Torso estreito e costelas moi marcadas. Pano de pureza con cordón, anoado á dereita. Pé dereito sobre o esquerdo e un cravo.


Como característica, os pés van apoiados sobre unha caveira.

Cruz reverso, a Virxe:
A Virxe representada é unha Dolorosa ou Piedade. Vai apoiada sobre dunha base circular dobre que apoia, a súa vez, no capitel. Atópase separada da cruz. Leva sobre da testa unha coroa que está na cruz, non na súa cabeza; e, como curiosidade e a diferencia de moitas outras Piedades, non vai cuberta de manto, só leva unha especie de veo cubríndolle a cabeza.


O Cristo xacente no seu colo é de menor tamaño ca imaxe da Virxe e máis miúdo.

E agora vén a característica de que falaba ao comezo e que é especial, pois non a atopei noutros cruceiros da zona:
O tallo ou obxecto sobre do que vai sentada é cilíndrico e nos extremos leva gravados o Sol e a Lúa. Pola banda que da a Igrexa podemos ollar o Sol, cunha cara humana e os raios saíndo do círculo. Pola outra, a que dá ao camiño, vese a Lúa (o día e a noite, a luz e a escuridade). Esta representación do Sol e da Lúa xunto da Virxe, xa son nomeadas por Castelao no seu libro “As cruces de pedra na Galiza” por telas atopadas nalgúns cruceiros estudiados por el.

Non hai data da súa construción.


Outra particularidade deste cruceiro é que está trocado da súa orientación orixinal, antes o Crucificado estaba ollando cara o Camiño Real (que ía a Vila e as Veigas) e hoxe está ollando cara o camiño que entra da estrada xeral, co que a Virxe olla cara a igrexa. Hai uns anos, na festa que alí se celebra (o San Andrés) un camión deulle un golpe ao cruceiro e moveulle as gradas, no arranxo foi cando lle cambiaron a orientación, o que non sei se foi a propósito ou por despiste. Penso que non debera ser así, pois aínda que hoxe non hai Camiño Real (está a Depuradora de Endesa) o cruceiro debera manter a súa posición orixinal pois sempre nos estaría a dicir que por aquela banda viña un camiño que se cruzaba con outro.


Tamén lle engadiron catro pedras de protección cada unha na súa esquina, que antes non tiña.

Texto e fotografía aportados por D. Xose María López Ferro, director do Museo Etnográfico Monte Caxado de As Pontes, a quen agradecemos o seu traballo e colaboración.

ORACIÓN A LA VIRGEN DEL CARMEN

Tras el repentino fallecimiento del Reverendo D. Manuel Ares el pasado martes 19 de Abril de 2022, un grupo de sus colaboradores en las parroquias de la Unidad Pastoral de As Pontes, queremos rendirle un homenaje, y continuar con su legado, mediante la publicación de una serie de documentos y archivos gráficos con el fin de preservarlos y que todo el mundo pueda disfrutarlos como a él le gustaría.

ORACIÓN A LA VIRGEN DEL CARMEN

Quiero dedicar esta oración a la Virgen del Carmen, en nombre de todos los ponteses y las personas que nos acompañan en este día.

Virgen del Carmen:

Tenemos mil dificultades, ayúdanos

De los enemigos del alma, líbranos

En nuestros desaciertos, ilumínanos

En nuestras dudas y penas, confórtanos

Cuando nos desprecien, anímanos

En las tentaciones, fortalécenos

En las horas difíciles, consuélanos

En tu inmenso poder, protégenos

En tus brazos al expirar, recíbenos.

Amén

De Fina González. Año 2018

FALLECIMIENTO DEL REVERENDO D. MANUEL ARES FERNANDEZ

Recibimos con profundo dolor la noticia del fallecimiento de nuestro hermano D. Manuel Ares Fernández ( Ribadeo 1968 – As Pontes 2022), aquel que nos acompañó en una parte de nuestro proceso de iniciación y nos regaló su enorme experiencia de fe. Que el abrazo amoroso del Señor que ahora te rodea se extienda a tu familia y la inunde de toda la paz que necesita en estos duros momentos.

La capilla ardiente se instalará a las 18h en la Iglesia parroquial de Santa María de As Pontes. A las 21h se rezará el Rosario por su eterno descanso.

La misa funeral de cuerpo presente tendrá lugar mañana miércoles a las 17h en la Iglesia parroquial de Santa María de As Pontes y a continuación tendrá lugar el entierro en el Cementerio municipal de Ribadeo.

El jueves a las 12 h tendrá lugar una misa por su eterno descanso en la Iglesia parroquial de Santa María do Campo de Ribadeo

PATRIMONIO PONTÉS II

Imos falar logo das cruces e comezamos cos cruceiros, temos arredor duns 40 entre cruceiros completos e incompletos. E aclaro esta clasificación persoal que fago: Todos os cruceiros non son iguais nas súas partes, algúns carecen de partes que outros teñen. Para min, cruceiro completo é o que ten as seguintes partes: plataforma, pedestal, varal ou fuste, capitel, cruz anverso (Cristo) e reverso (Virxe). De faltar algunha destas partes, sería un cruceiro incompleto e metendo dentro destes os chamados Cristos ou cruces altas, xa que levan, ás veces, gradas (unha ou dúas) e outras un pedestal.


Tamén poden levar: pousadoiro (onde se pousaban os cadaleitos para rezarlle un responso ao defunto cando ía camiño da igrexa-cemiterio; a capela ou peto de ánimas; relevos da Paixón, etc.

Posiblemente sexa un dos elementos máis coñecidos e máis destacadas na arte galega que Castelao definía como “Onde hai un cruceiro cáseque sempre houbo un pecado, e cada cruceiro é unha oración de pedra que fixo descender un perdón do ceo, polo arrepentimento de quén o pagou e polo sentimento de quén o fixo”.


Son cruces altas, que moi posiblemente teñan a súa orixe nos primeiros séculos do cristianismo, coa cristianización dos miliarios romanos e das pedras fitas. Colocouse sobre eles e elas, cruces e, co paso do tempo fóronse transformando nos cruceiros.

A súa finalidade é variada: nas encrucilladas transmitían protección diviña ós camiñantes, sinalaban a estación de rezo dun responso ó cadaleito cando pasaba por diante del, é o lugar arredor do que se fai a procesión o día da festa, é unha sinal externa de paternal acollida na igrexa o ermida a carón da que está, lugar onde cos rezos podemos gañar indulxencias…

E no exemplar do que imos falar hoxe, descubriremos outra finalidade moi curiosa, a razón da que por que se fixo este cruceiro.

Mais antes de falar del, imos coñecer as partes do cruceiro que citei ao comezo:


* A plataforma, case sempre cuadrangular, cunha, dúas ou máis gradas de cantería ou ben en cachotería de lousa ou gneis. É o base do cruceiro.

* O pedestal, vai sobre da plataforma, xeralmente, ten xeito de cubo ou dividido en partes, tamén pode ser cilíndrico.

* O varal ou fuste, columna encaixada no pedestal e que sostén e ergue a cruz. De feitura octogonal, hexagonal, cadrada ou cilíndrica.

* O capitel, atópase entre o varal e a cruz, vén sendo como un tronco de pirámide cuadrangular invertida, isto é, a parte máis ancha cara arriba e a máis estreita cara abaixo.

* A cruz, é a parte máis importante do cruceiro, ten a feitura octogonal, cadrada, cadrada con chafrán ou cilíndrica, aínda que tamén pode ser nodosa a xeito de tronco de árbore.

A cruz ten dúas partes: o anverso, onde vai o Cristo; e o reverso, onde vai a Virxe. Nela, tamén, pode ir: o letreiro de INRI, a caveira, a coroa, etc. Ás veces tamén se pode observar algún santo ou anxo.

Outras partes non xeneralizadas e que só uns poucos exemplares teñen son:

  • o pousadoiro ou especie de mesa que serve para pousar os cadaleitos e rezarlle o responso ao defunto.
  • a capela ou peto das Ánimas onde vai a imaxe da Virxe, santo ou ánimas; dándolle o nome de cruceiros de Loreto ou de Ánimas aos que a teñen.
    • o farol de aceite, nalgúns cruceiros colgábase un farol de aceite suxeito, polo xeral, dun dos brazos da cruz cun aro metálico e unha cadea para subilo e baixalo.
    • policromía, algúns exemplares estaban pintados, nuns casos todo o cruceiro e, noutros, só a cruz. Facíase con cores vivos e planos.

O cruceiro do que vou falar hoxe é dos que eu clasifico como incompletos, quero comezar con el porque para min foi unha sorpresa agradable descubrir no seu día a finalidade pola que foi feito. O exemplar coñécese co nome de CRISTO DE PRADA ou CRUCEIRO DE PRADA.

Imaxe do cruceiro de Prada


E quero comezar con el porque se o conservamos hoxe dentro do noso patrimonio pontés é grazas a D. Xabier Martínez como logo explicarei e engado, unha vez máis, que o noso pobo lle debe moito a este crego que estivo exercendo o seu sacerdocio aquí, nas Pontes e que traballou arreo por poñer en valor a nosa historia e o noso patrimonio.

CRUCEIRO DE PRADA-O FREIXO

Carece de plataforma, capitel e imaxes do Cristo e a Virxe na cruz. Polo que só analizaremos as que ten: pedestal, varal e cruz.


Situábase este cruceiro na entrada da pista que vai a Santomé e ao Deveso e na marxe esquerda da estrada As Pontes de Gª Rguez.-Ortigueira; pertencente á parroquia do Freixo. É un cruceiro de encrucillada de camiños.


Posteriormente foi trocado de sitio e de posición, hoxe dá a estrada e antes estaba situado no lateral da pista que vai ao Deveso e orientado cara ela. Cando amañaron a pista estiveron a piques de derrubala, pois o construtor dicía que aquelo non tiña valor. Mais un familiar (D. Ovidio García) dos descendentes de Antonio Prada, interesouse por el na Igrexa Parroquial de As Pontes de Gª Rguez. e o crego, naquel entón, Xabier Martínez, viu que estaba catalogada e documentada dentro dos Cruceiros de Galicia, fíxose unha fotocopia e levóuselle ao contratista e foi a forma de salvalo e conservalo. De non ter intervido D. Ovidio e D. Xabier, hoxe este cruceiro sería unha lembranza máis, coma moitos outros, e teríao que incluír no apartado de desaparecidos.

Pedestal:
É un sinxelo e alto pedestal feito de laxes de pedra (cachotería) da zona (ollo de sapo). Ten forma de prisma cuadrangular duns 60-70cm de altura, aproximadamente, e nel vai encaixada o varal.

Varal:
Un claro exemplo este de varal curto, de base cuadrangular e de sección octogonal irregular.
Non existen inscricións, nin figuras; polo que é un varal liso. O material do que está feito é de granito.

Cruz:
A Cruz é de sección cadrada, vai apoiada no varal. O curioso deste cruceiro é que a Cruz apoia directamente no varal e parece que vai encaixado nela polo cemento que lle deron na unión de ámbolos dous.


Neste caso temos un exemplo de cruz grega, isto é, brazos iguais. Os remates dos brazos horizontais e o superior vertical están, lixeiramente, frorenzados.


O material no que está feita non é granito coma no caso do varal, senón que é toelo ou pedra serpentina.


Leva inscrición e reza así:

POR
ANTONIO PRADA
AÑO
DE
1858

O nome e os motivos polos que se fixo:
O nome de Cristo de Prada, como xa dixen, venlle da persoa por quen se erixiu. Ten este cruceiro unha historia peculiar, pois é un cruceiro feito por “amor”, supoño que será este un motivo que nunca se recolleu na feitura dos cruceiros.


Situámonos a mediados do século XIX, cando non había moitos medios de viaxar e coñecer a outras xentes. Os mozos e mozas dunha parroquia casaban entre si e, como moito, cas e cos das parroquias veciñas se non estaban moi lonxe. A parroquia do Freixo é unha das máis extensas do concello. Dous curmáns namóranse un do outro e deciden casar. A igrexa poñía moitas trabas para facelo entre familiares. Unha das solucións era pedir a dispensa a Roma, trámite custoso e que levaba moito tempo, pois entre que ía e viña a petición podían pasar anos. O crego que levaba a parroquia naquel entón accedeu a falarlle co Bispo e conseguirlle a dispensa. En troques, el tiña que erixir un cruceiro nunha encrucillada de camiños. Como esta solución era máis económica e rápida, non o dubidou e erixiuno na encrucillada dos camiños: As Pontes de Gª Rguez., Ortigueira, O Freixo e Santomé (O Deveso). E deste xeito puido casar coa curmá. Dende entón o cruceiro leva o seu nome (Antonio Prada), cruceiro de Prada ou O Cristo de Prada.

Texto e fotografía aportados por D. Xose María López Ferro, director do Museo Etnográfico Monte Caxado de As Pontes, a quen agradecemos o seu traballo e colaboración.

PATRIMONIO PONTÉS I

Unha vez rematado cos artigos de D. Enrique e seguindo no seu camiño, o que vou tratar de dar a coñecer é un pouco do noso patrimonio material pontés que, ás veces, é descoñecido, pois nos centramos no que nos é máis próximo, sen decatarnos de que o noso concello é bastante grande e nas súas parroquias tamén hai moito patrimonio agardando a ser descuberto. Ben, pois o que pretendo con estes artigos é descubrilo á xente, dalo a coñecer, porque sabendo del é máis difícil que se perda, pois sempre haberá quen se interese por el.


Hai unha grande parte deste patrimonio (igrexas, cemiterios, cruces, cruceiros…) que dalgún xeito está relacionado directamente coa igrexa ou co aspecto cristián, outra parte ao mellor non, máis indirectamente algúns tamén (como pode ser o caso dalgún reloxo de sol, algunha ponte…).


D. Enrique descubriunos unha gran parte del nos seus artigos, polo algúns elementos son xa coñecidos, pero poida que aínda teñamos algúns sen descubrir. Por todo o noso municipio temos igrexas, pontes, muíños, hórreos, cruces, cruceiros, reloxos de sol, pedras con historia, mámoas, castros… Que sabemos e coñecemos de todo isto? En moitos casos si teremos información, noutros, ningunha; en moitos casos si coñeceremos ese elemento patrimonial, noutros, será totalmente novo para nós.


Imos por tanto a tratar de amosar algúns elementos patrimoniais.

E xa que estamos no Domingo de Ramos (o día que comezo este artigo) pois vou comezar falando dun elemento, símbolo do cristianismo, da cruz.


Dentro do noso concello hai moitísimas representacións deste elemento e tamén variada tipoloxía. Non todas son iguais, nin do mesmo tamaño, nin todas teñen a mesma finalidade.

Cruz de termino da Pedrafita



Se nos remontamos na historia do home para atopar este símbolo, inicialmente teríamos que ir á Prehistoria, nela aparece a cruz coma símbolo antropomorfo, testemuñado nos petróglifos galegos, por exemplo. Tamén poderíamos dicir que é un símbolo universal, pois aparece en case todas as culturas. En Exipto a cruz ansada “anj” simbolizou a inmortalidade. Os cartaxinenses e os fenicios a empregaban como instrumento de sacrificios a “Baal”. Os persas como “talismán” contra o mal e a morte. Para os galos un símbolo solar… E poderíamos seguir.

Os cristiáns primitivos evitaron no posible, nun principio, a exteriorización de dito símbolo para evitar represalias e por tratarse dun suplicio infame.


Vai ser no Oriente onde nacerá a cruz como símbolo representativo do cristianismo e que logo pasará a Occidente. Dende o soño do emperador Constantino, cara o 312 (“In hoc signo vinces”: Con este sinal vencerás), que precedeu a súa vitoria na ponte Milvio, e o descubrimento da verdadeira Cruz de Cristo, en Xerusalén, no ano 326, pola nai do mesmo emperador, Elena, a atención dos cristiáns cara a Cruz foi medrando.

No que respecta ao noso pobo galego, podemos ver que toda Galicia está inzada de cruces, foi un elemento moi empregado, pois é un símbolo de protección para as xentes, gandos, sementes, colleitas…

Estudando as nosas cruces pontesas, podemos dicir que temos unha grande variedade espalladas por todas as nosas parroquias e que persoalmente as clasifico en:

1. As dos cruceiros
2. As cumiais (situadas nos cumios das casas, igrexas, hórreos…)
3. As indicativas de mortes (chamadas tamén de desgracia)
4. As riscadas (gravadas na pedra)
5. As labradas (en relevo na pedra)
6. As dos panteóns ou nichos
7. As de término.

Nos vindeiros artigos iremos vendo algúns exemplos que nos axudarán a coñecer mellor o noso patrimonio pontés.

Texto e fotografía aportados por D. Xose María López Ferro, director do Museo Etnográfico Monte Caxado de As Pontes, a quen agradecemos o seu traballo e colaboración.

DEL COMBATE A LA VIDA

Versión audio del articulo

En cierta ocasión, le pregunté
a un anciano profesor de Antiguo Testamento si no era acaso el de Lucas su evangelio preferido. Su respuesta fue rotunda: «¡en absoluto! El evangelio de Lucas es amable en exceso. Suprime ciertas escenas en las que hay dureza». El relato de la Pasión de Cristo llevaría, por cierto, el agua a su molino: Lucas reduce al mínimo la violencia sufrida por Jesús. No le vemos coronado de espinas ni azotado ni escupido ni siquiera abandonado por sus discípulos.



Más aun. La dureza de algunas escenas queda muy atenuada por otras mucho más consoladoras: poco después de ver a Pedro renegando de Jesús le escuchamos comprometiéndose a salvar la fe y a confirmar en ella a sus hermanos; tan pronto como el criado del sumo sacerdote sufre la mutilación de su oreja, ésta vuelve de nuevo a su sitio; uno de los bandidos crucificados con Jesús se vuelve a él y escucha la promesa de que estará con él en el paraíso; la gente que se había quedado mirando la crucifixión se vuelve arrepentida ¿No es éste un evangelio dulcificado? ¿Y si no fuera, más bien, lo contrario? ¿No pone Lucas el acento en la puerta de la vida que podemos abrir todos si aceptamos nuestros combates cotidianos? Veamos…

La clave para comprender el relato de la Pasión nos la proporcionan aquellas palabras de Lucas en la escena de Getsemani:

«En la hora de la agonía Jesús rezaba aun más intensamente»



Por desgracia, el texto litúrgico traduce la palabra «agonía» por «angustia». «Agonía» es una palabra de origen griego que viene a significar «lucha» o «combate». El verbo «agonizar» significa, ante todo, «combatir» o «luchar por». Aceptar los combates de la vida no es posible, ciertamente, sin ansiedad, turbación y angustia. Pero no es la angustia sino la lucha misma lo que da vida. Cada vez que recordamos la vida de Jesús, asistimos a combates en muchos momentos de la misma: las luchas interiores más variadas, desde el episodio de las tentaciones hasta el duro testimonio de su proceso, pasando por sus curaciones e invitaciones a cambiar de vida.

Vivir es luchar sin tregua a fin de nacer a nosotros mismos y ayudar a otros a que nazcan, también ellos, a sí mismos. La impresionante historia del noruego Bose Ousland y del sudafricano Mike Horn puede ayudarnos a entender la lucha de la vida. En Enero del 2006 salieron de Siberia y llegaron al Polo Norte en marzo de ese mismo año, en plena noche ártica. Todo el camino lo hicieron a pie y esquiando.



Lo que recuerdan ambos más intensamente no es el haber llegado al Polo Norte sino el combate de cada momento, la victoria sobre la tentación de abandonarlo todo cada vez que la banquisa, empujada por los vientos en dirección contraria, les forzaba a retroceder, la lucha contra el intenso frío que congelaba sus dedos y su rostro, los contados pasos que lograban avanzar cada noche, con más de 150 kilos de carga a sus espaldas y sin visibilidad alguna. Dejar de avanzar suponía la muerte. Al fin, no fue el Polo Norte lo que se encontraron sino, en cierto modo, a sí mismos.

La mayor parte de las veces no elegimos nuestros combates. Alguien que se encuentra con un diagnóstico de cáncer, ¿ha elegido este combate? Una pareja con un hijo discapacitado, ¿ha elegido este combate? Alguien que se ocupa de su padre enfermo o sin movilidad, ¿ha elegido tener a su padre en un estado así? ¿Y qué decir de la persona que descubre un día su homosexualidad? ¿Podríamos cambiar algo si echasemos la culpa de todo a unos genes defectuosos o a unos padres responsables de nuestros problemas con el alcohol o la droga? Lo único que cuenta es la lucidez de reconocer que tenemos ante nosotros un combate, aceptarlo y encontrar la vida en él.



De esto nos habla la escena de Getsemani. En ella vemos a Jesús debatiéndose entre aceptar el combate hasta el fin, muerte incluida, o poner tierra de por medio. Por Lucas sabemos que Jesús debió de rezar con todas sus fuerzas y sudar gotas de sangre, lo cual da idea de lo difícil que fue para él la situación. Pero el evangelista quiso poner de relieve, ante todo, la vida que el propio combate suscita desde el principio. Hay aquí algo contagioso: uno de los malhechores crucificados con Jesús se resiste a maldecir su propia suerte y acepta un nuevo combate volviéndose a Jesús. Éste le abre entonces las puertas de una vida inesperada. La gente que se fue del Golgota dándose golpes de pecho se enfrenta ahora al reto de una vida nueva.

Aceptar o no el combate de la vida es algo tremendo que está en nuestras manos ¿Amamos la vida de veras? Si la amamos sabremos qué decisión tomar.

Texto de André Gilbert

Trad. por V.M.P.